En Jalisco, México, la ofensiva de Caribes de Anzoátegui se ha hecho sentir. Ha sido la clave -luego del primer juego donde cayeron ante Cuba- para que los orientales consiguieran su boleto a las semifinales de la Serie del Caribe 2018.
Ante la delegación cubana, que está representada por los Alazanes de Granma, batearon. De hecho, dispararon nueve hits, pero el batazo oportuno nunca llegó y el pitcheo trastabilló durante todo el compromiso.
Aquí el resto de las claves del equipo oriental:
Bates encendidos
No solo Balbino Fuenmayor y René Reyes se han encargado de producir para Anzoátegui durante la Serie del Caribe. Alexi Amarista, un hombre de experiencia en las Grandes Ligas, también se ha hecho sentir, al igual de Rafael “Balita” Ortega y el jardinero Williams Astudillo, quien promedia en el torneo para .429, con un jonrón y tres remolcadas.
Han sacado la fuerza
El estadio Charros de Jalisco les ha quedado cortos a los hombres del mánager Omar López, y eso lo demostraron en el segundo juego ante Dominicana, donde dispararon cuatro cuadrangulares. Y el domingo ante México, Astudillo conectó un vuelacerca que fue clave para que Venezuela se llevara el triunfo.
Relevo efectivo
A excepción de Daryl Thompson, el pitcheo de Caribes de Anzoátegui ha respondido, sin contar el juego de ayer, durante todo el torneo. Sobre todo el bullpen, el cual ha sacado la cara en los momentos más cruciales, en especial el derecho Víctor Capellán y el zurdo Liarvis Breto, quienes en dos encuentros lanzados poseen efectividad de 0.00.
Abridores consistentes
Las dos victorias que han logrado los Caribes de Anzoátegui en lo que va de Serie del Caribe han venido de parte de la labor de los abridores. Freddy García estuvo imbatible ante la República Dominicana y Néstor Molina, quien fue tomado como refuerzo de Cardenales de Lara, también se mostró efectivo en su presentación ante la delegación mexicana.
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